Presionamos a la UE para que utilice su poder e influencia sobre los gobiernos y las empresas tecnológicas para que se respeten nuestras libertades fundamentales.
Austria, Alemania, Hungría y Países Bajos han sido escenario de protestas contra el confinamiento en las últimas semanas. Algunas están motivadas por cuestiones políticas, otras por extremismo.
La vigilancia por reconocimiento facial supone una amenaza para las sociedades libres: invade nuestra intimidad, refuerza los prejuicios raciales y facilita una vigilancia policial y masiva generalizada.
La imposición de la prohibición del aborto en Polonia por parte del gobierno autocrático supone un ataque a la democracia y a los derechos humanos, una amenaza a la independencia judicial y a las personas LGTBQ. La UE debe tomar cartas en el asunto.
Mientras la UE intenta enfriar las discusiones sobre el pasaporte de vacunación, varios Estados miembros, organizaciones internacionales de comercio y una pequeña ciudad del sur de Alemania toman medidas para ponerlo en marcha.
Mientras los gobiernos de todo el mundo se concentran en estrategias de vacunación para proteger a la población de la COVID-19, se ha encendido el debate acerca de qué supone la vacuna para las libertades civiles, como la libertad de movimiento en la UE.
El pasaporte de vacunación es un tema candente ahora en Bruselas. Si la UE y los gobiernos añaden la libertad de movimiento a la lista de libertades solo disponibles para quienes estén vacunados agravarán las diferencias sociales dentro de los países.
Casi 50 sentencias de los tribunales españoles relativas al delito de enaltecimiento del terrorismo analizadas: un número importante de decisiones son incompatibles con el derecho internacional de los DD.HH que rige el derecho a la libre expresión.
Tres mujeres polacas serán juzgadas por ofender los sentimientos religiosos por haber hecho unos pósters del icono más sagrado en Polonia, la Virgen María, con un halo de arco iris.