El ministro de Asuntos Sociales neerlandés, Lodewijk Asscher, ha puesto un millón de euros para un programa que ofrece oportunidades de voluntariado a los refugiados. Esto afecta a personas en refugios, independientemente de si tienen permiso de residencia. Según el ministro, esto contribuirá a su conocimiento de la lengua y sociedad neerlandesa y aumentará sus posibilidades de encontrar empleo. Tras un periodo de prueba en Nijmegen y Utrecht, el proyecto se extenderá a otros 10 centros de refugiados. En 2.5 años, 25 municipios deben participar activamente ofreciendo trabajo a los refugiados.