La Fundación Helsinki por los Derechos Humanos ha intervenido en el caso de Daniel, que padece desde hace años esquizofrenia paranoide y que fue condenado a 9 meses de cárcel por intentar falsificar un documento. En el centro de prisión preventiva, estuvo encerrado en una celda de alta seguridad. Ahora continúa en una celda de aislamiento, donde permanece 23 horas al día. Las autoridades penitenciarias no quieren dejarle trabajar, ni tampoco le ofrecen ningún tipo de terapia. Además, Daniel transmitió a la HFHR que no tiene acceso a todos los medicamentos que le prescribieron en el hospital