Los empleadores no están autorizados a procesar datos de salud con la ayuda de pulseras inteligentes que registren movimientos y patrones de sueño. Dos empresas recibieron un toque de atención por parte de la Autoridad de Protección de Datos holandesa (DPA). Habían proporcionado a sus empleados pulseras que monitorizaban su cantidad de movimiento. Uno de los empleadores también obtuvo datos sobre los patrones de sueño de los empleados. Los empleadores no están autorizados a procesar estos datos: pueden regalar pulseras de ese tipo a sus empleados pero no establecer condiciones de uso.