Asociaciones que trabajan con salud mental y Antigone advierten del riesgo de retroceder en el tratamiento psiquiátrico de las personas detenidas. Los Hospitales Psiquiátricos Judiciales en Italia se eliminaron en 2014 y se sustituyeron por instalaciones designadas a ayudar a los detenidos con problemas graves que no pueden acogerse a otras alternativas al encarcelamiento. Pero un nuevo decreto amenaza con transformar las nuevas instalaciones psiquiátricas en algo similar a los viejos asilos penitenciarios, abriéndolos incluso a quienes están bajo observación por su condición psiquiátrica.