Las organizaciones de la sociedad civil "Welcome" y la Plataforma de Solidaridad Civil Internacional-CROSOL, alertaron de las violaciones de derechos humanos llevadas a cabo por las políticas del presidente turco, al que tildaron de dictador.

Las ONG organizaron una acciónd e protesta durante la visita del presidente turco Recep Tayyip Erdogan. El mensaje de su pancarta leía: "¡UE, has vendido tu alma al diablo!"

"El beneficio económico (de las inversiones) de Croacia es extremadamente sospechoso y confuso, pero existe mucho información y pruebas de violación de una serie de derechos en Turquía que ha sido corroborada extensamente", rezaba el comunicado de las ONG.

Señalan que las autoridades turcas bajo el mando de Erdogan han sido acusadas de matar a refugiados en la frontera siria, que Turquía envió ilegalmente a miles de refugiados de vuelta a Siria y que las condiciones en los centros de acogida y detención de refugiados en Turquía "son indignas de cualquier ser humano, y menos de personas que están en búsqueda de refugio y seguridad".

"La lista podría seguir con más argumentos que dejan claro que Turquía es todo menos un país seguro, por ejemplo, los aspectos legales y prácticos del polémico Acuerdo UE-Turquía. Entre otras cosas, la UE, incluída Croacia como país miembro, viola con este acuerdo la legislación internacional y el Estatuto del Refugiado del Convenio de Ginebra, que es el mecanismo fundamental de asistencia a personas que necesitan protección", afirmaron las dos ONG.

Abuso diario

Hicieron hincapié en el hecho de que tanto ciudadanos turcos como miembros de grupos étnicos que viven en Turquía constituyen una de las mayores comunidades de refugiados en el mundo, huyen del país para protegerse de violaciones de derechos humanos, o por restricciones de la libertad de expresión y de otras libertades.

"Turquía es un país en el que activistas, académicos y trabajadores de la comunicación reciben a diario acoso verbal, se les detiene por publicar contenido contrario al del gobierno y se les castiga con multas astronómicas bajo el pretexto de que difaman al partido gobernante, obligándoles a la autocensura por vía de sobornos y amenazas a los editores y propietarios de los medios de comunicación, mientras que cientos de casos de asesinatos de periodistas quedan sin investigar. Por si esto fuera poco, volvemos a insistir en que es un país donde se violan sistemáticamente los derechos de los trabajadores, de las mujeres y de las personas LGBT, donde desde el final de la Primera Guerra Mundial existe un conflicto étnico entre turcos y kurdos, y donde las personas que piensan diferente se enfrentan a las llamadas 'operaciones antiterroristas'", lee el comunicado.

Después de la acción de protesta, que tuvo lugar frente al hotel donde se realizaron las reuniones, los activistas colgaron una pancarta del balcón del estudio de la artista Sanja Iveković, pero la policía rápidamente la retiró, bajo la excusa de que era una amenaza para la seguridad