A principios de enero, el Tribunal Superior de Justicia de Olomouc ratificó el veredicto del Tribunal Provincial de Brno en el famoso caso de la "ambulancia de Brno", dando la razón a los demandantes. Después de casi siete años, una madre y su hijo recibirán una disculpa por la violación de sus derechos en relación con un traslado involuntario al hospital después de dar a luz.
Cada uno de ellos recibirá una indemnización económica de 50.000 CZK (1.850 euros). El demandado, el Servicio de Salvamento Médico de la Región de Moravia del Sur, aún puede interponer un recurso al Tribunal Supremo.
Traslado involuntario
La disputa se centraba en torno al derecho del médico de ambulancia a forzar (ayudado por la policía) a una madre y a su recién nacido en el hogar a ir a un hospital en una situación donde el bebé no presentaba ningún signo de malestar ni enfermedad y los progenitores deseaban permanecer en casa con el niño y solicitar asistencia médica más tarde.
Otra cuestión en disputa en este caso era quién era responsable de la hipotermia del bebé, diagnosticada en el momento de la admisión en el hospital.
De acuerdo con el dictamen oral del Tribunal Superior de Justicia, el Tribunal de Primera Instancia hizo lo correcto al fallar a favor de los demandantes, siguiendo debidamente antecedentes legales establecidos. Los jueces del Alto Tribunal mencionaron en particular el dictamen del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el caso de la Familia Hanzelka contra la República checa, donde quedó establecido que el nacimiento es uno de los momentos más sensibles de la vida, lo cual implica que deben existir motivos particularmente urgentes y una amenaza inminente para hospitalizar a un recién nacido contra la voluntad de sus progenitores. Los jueces también mencionaron un veredicto de 2015 del Tribunal Constitucional checo que exige que cualquier intervención involuntaria por parte de personal médico esté justificada por una alta probabilidad de daño para el niño.
Los jueces del Tribunal Superior de Justicia dictaminaron que la hipotermia del bebé había sido ocasionada por la intervención del personal de la ambulancia. Las pruebas demostraban que el bebé se había mantenido caliente en el abdomen de su madre hasta la llegada de la ambulancia y que el médico citado no había sospechado de ninguna hipotermia. Fue su intervención lo que ocasionó la separación del bebé de la madre durante un periodo de tiempo largo, sin el uso de ningún cobertor término ni de una incubadora de transporte.
Beneficio del menor
La abogada de los demandantes, Zuzana Candigliota, dice en relación con el caso:
"En mi alegato final, recalqué que la legislación checa no obliga a los progenitores a hospitalizar automáticamente a su hijo después del nacimiento. Los progenitores del niño son los que determinan en primer lugar qué es lo que le conviene al bebé, teniendo en cuenta consideraciones más allá del aspecto médico, como los beneficios para el menor de un contacto tranquilo después del parto con la madre y de un amamantamiento sin distorsiones. Permitir que los profesionales médicos utilicen libremente la hospitalización involuntaria también en casos donde no existe amenaza inminente para la salud del niño conduciría a un abuso indeseable de esta posibilidad por parte del personal sanitario y a la violación de los derechos de los pacientes"