Respondiendo a la convocatoria para participar en el Día de Acción Global 2014, celebrado el 26 de junio, el programa Drugreporter de la Hungarian Civil Liberties Union lanzó su campaña de "Habitación en el Octavo". El objetivo de la campaña es educar y movilizar a la opinión pública, específicamente los residentes del Distrito 8 º de Budapest, para que apoyen soluciones innovadoras de reducción de daños como alternativas a la criminalización.

La campaña recurrió a la ayuda de especialistas de la Web y de medios para crear una película y un portal y mantener la presión pública sobre el tema como parte de los esfuerzos para mantenerlo en la agenda política.

Intercambio de jeringuillas limpias bajo presión política

Desde el 2006 la organización no gubernamental Blue Point ha estado proporcionando jeringas y agujas limpias a usuarios de drogas inyectables en el Distrito Octavo de Budapest, una de las zonas más marginadas y pobres de la ciudad. Este programa llegó a más de 3.000 usuarios y fue una de las pocas medidas operacionales para combatir la transmisión del VIH entre usuarios de drogas, pero fue cerrado por presión de la alcaldía local.

El alcalde se ha estado reuniendo con residentes para convencerlos de que la solución al problema de las drogas en el distrito es cerrar programas de intercambio de agujas, que dice que atraen a los adictos. Nuestro objetivo es convencer a la gente de que esta solución es más, no menos, perjudicial.

Falsos demonios en lugar de amenazas reales a la salud

Hay una gran desconexión entre las amenazas reales a la salud pública de las drogas y las amenazas que el público percibe. Un ejemplo de esto es que los ciudadanos estén más preocupados por la basura en la calle que por que los usuarios de drogas compartan jeringas y agujas. La posibilidad de que se infecte un transeúnte al tocar una aguja usada en la calle es mínima, mientras que el riesgo de transmisión a través del intercambio de material de inyección es grande.

"Habitación en el Octavo" destaca los beneficios de los servicios de reducción de daños con el fin de atraer a un público más amplio. Las quejas más comunes de los vecinos, (los restos de drogas usadas, las "narcosalas" extra oficiales donde los usuarios se inyectan a menudo abiertamente, la molestia general y el ruido causado por los usuarios), son todos problemas que encuentran solución con el programa "Habitación en el Octavo": este crea un ambiente seguro e higiénico en el cual los usuarios pueden consumir sus drogas, utilizando material estéril y bajo supervisión. Esta es la "habitación en el Octavo," un lugar que hace que la situación sea más segura tanto para usuarios como no usuarios.

Apoyo online y offline por parte de los ciudadanos

"Habitación en el octavo" ha creado un portal en linea para comunicar su mensaje a los medios de comunicación de varias maneras, incluyendo el portal y un video de la campaña. El portal anima a la gente a firmar una petición online dirigida a quienes toman decisiones en el gobierno local, municipal y nacional con estrategias y técnicas para crear una mejor situación para los usuarios y no usuarios. Unas 2.000 personas firmaron la petición en línea durante la primera semana de la campaña, y el número de firmantes ya supera los 5.400.

La película de la campaña con una duración de 20 minutos muestra a usuarios de drogas, profesionales y residentes locales hablando sobre la situación en el Distrito 8 º de Budapest. A través de entrevistas con personas del barrio, el video no pretende ocultar los miedos y los problemas de los residentes locales, sino que intenta entenderlos e investigar las posibles soluciones y los resultados beneficiosos para todos.

Desarrollo de la campaña

La campaña "Habitación en el Octavo" llevó a cabo un acto público en Budapest el 26 de junio, durante el cual se proyectó la película y se celebraron debates sobre los temas presentados en la película y otros esfuerzos de la campaña. La campaña también ha sido publicitada en los medios húngaros, incluyendo el sitio web 444. hu además de canales de televisión. La campaña fijó carteles por toda la ciudad declarando: "Usa tu firma para apoyar una ciudad libre de restos de droga".

Perspectivas de futuro

La campaña "Habitación en el octavo" fue lanzada en un ambiente político muy hostil, donde el apoyo por un lugar limpio, higiénico para los usuarios de drogas no parecía la solución más favorable ni la más fácil para muchas personas. El Gobierno, a través del Ministerio de Recursos Humanos, ha dicho que sigue comprometido con la búsqueda de una solución de reducción de daños, pero no apoya la apertura de un sitio en donde se puedan inyectar higiénicamente los estupefacientes . A pesar de la respuesta del Gobierno, la campaña ha sido exitosa en su intención de sensibilización, generando la atención de los medios y aumentando el debate público sobre el tema.