Un colegio en Dinamarca ha dividido las clases por origen étnico para evitar que los estudiantes autóctonos se marchen. Según el director esto se debe a que ha habido un gran aumento de alumnos inmigrantes, que ha afectado los ratios de autóctonos e inmigrantes (que han pasado de 75/25 a 25/75% respectivamente). Por eso, la escuela ha dividido a los estudiantes en cuatro clases de inmigrantes y tres clases mixtas. El director considera que es una "decisión pedagógica y social" y ha recibido el apoyo de estudiantes. El ministro danés de Educación ha pedido una aclaración al colegio.