En Países Bajos, más de 400.000 niños crecen en la pobreza. No se puede permitir que estén aislados socialmente por ello. Un abrigo para el invierno, una bici, material escolar o clases de música son algunas de las cosas a las que podrán aaceder a través de los recursos municipales, que recibirán 100 millones de euros extra para proporcionar a los niños esté tipo de cosas. Según Jetta Klijnsma, Secretaria de Estado de Asuntos Sociales, el nuevo enfoque será más efectivo que aumentar las prestaciones: "El dinero muchas veces hace falta para otros gastos y deudas, y no le llega al niño".