Solo quedan cuatro radiodifusores a nivel nacional, todos pertenecen a la radiodifusión pública. Desde 1991, la radio, no había sido tan parcial en Hungría, según el sitio web sobre el mercado radiofónico kreativ.hu. La licencia de la última estación de radio privada, Class FM, estación que perteneció a Fidesz del oligarca en el exilio Lajos Simicska, ha expirado, silenciando la última estación comercial nacional. El nuevo propietario ha demandado al Consejo de Medios por perder la frecuencia. Hasta que el tribunal tome una decisión, el Consejo no podrá emitir una licencia de frecuencia.