El historial de derechos humanos de Bielorrusia ha provocado que una coalición deportiva, la Sports and Rights Alliance, exprese su preocupación por la celebración de los Juegos Europeos de 2019 en Minsk. En una carta dirigida a los Comités Olímpicos Europeos, pide que se pronuncien "con efecto inmediato" y advierte que Bielorrusia no ha cumplido los estándares básicos del derecho de protesta, la libertad de prensa y los derechos laborales y señala que esto contradice la Carta Olímpica que exige el respeto de la dignidad humana y de los principios fundamentales universales.