Una reforma de la normativa de la Comisión Europea obligará a los mandos intermedios a cambiar de ámbito político al menos una vez cada 10 años. La medida es una respuesta a los empleados que reclaman una mayor movilidad dentro de la CE y también pone en práctica el deseo de su presidente, Jean-Claude Juncker, de acabar con la compartimentación de equipos y personal de la UE. Se espera que la reforma ayude a desarrollar gestores capaces en lugar de especialistas sectoriales, de acuerdo con un funcionario. La primera rotación del personal está prevista para el 1 de enero de 2018.