De acuerdo con la Fundación Helsinki para los Derechos Humanos (HFHR), la imposibilidad absoluta de informar sobre la situación en el Parlamento priva a la opinión pública del acceso a una información fiable sobre las cuestiones más importantes relacionadas con el funcionamiento del Estado.

"La información sobre la actividad de los poderes legislativos forma parte del debate público que, según dicta el Convenio Europeo de Derechos Humanos y la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, debe protegerse", afirma la HFHR en su declaración.

Manifestaciones espontáneas

Los acontecimientos de mediados de diciembre, causados por el anuncio de la introducción de restricciones drásticas para los corresponsales parlamentarios, mostraron la importancia del papel de los medios de comunicación para la transmisión de información del Parlamento.

El 16 de diciembre, el portavoz del Sejm, la cámara baja del Parlamento, impidió que un diputado de la oposición continuara un debate y llegara a la tribuna con un cartel que decía "#Libertad de prensa en el Sejm". Como respuesta, la oposición bloqueó el acceso al estrado. Tras lo cual, el mariscal decidió trasladar la sesión y votar la ley de presupuesto en una sala separada.

A pesar de las protestas de la oposición, la ley de presupuestos fue aprobada. Se contaron los votos colectivamente y a mano porque la nueva sala no tenía dispositivos automáticos de recuento de votos.

"Los periodistas no pudieron informar sobre las deliberaciones parlamentarias porque la sesión fue retirada de la cámara plenaria y consecuentemente, los ciudadanos no pudieron obtener información fiable sobre los procedimientos del proceso legislativo y tampoco verificar ni evaluar el trabajo de los diputados", señala la HFHR.

Este provocó la protesta frente al Parlamento de distintos grupos de manifestantes que se oponían a las restricciones para la prensa en el Sejm. Las manifestaciones continuaron hasta altas horas de la madrugada, bloqueando todas las salidas del Parlamento para evitar que los parlamentarios del partido gobernante abandonaran el edificio.

¿Apoyará el parlamento unos medios de comunicación libres?

No es la primera vez que la Fundación Helsinki para los Derechos Humanos hace una declaración sobre el trabajo de los periodistas en el Sejm. En octubre ya envió una carta al portavoz del Sejm para recordar que el libre acceso de los periodistas al Parlamento y la posibilidad de grabar audio y vídeo e informar al público, forman parte de los derechos fundamentales de la prensa en un Estado democrático regido por la ley.

"Una vez más, instamos a que los periodistas puedan informar eficazmente sobre los que ocurre en el Sejm. También hacemos un llamamiento al Parlamento para que no introduzca restricciones excesivamente restrictivas y limitaciones al trabajo de los corresponsales parlamentarios que se traduzcan en la imposibilidad de poder desempeñar una de las responsabilidades fundamentales de los medios de comunicación, la de ser 'vigilantes públicos'", afirma la HFHR.