A finales de enero se debatirá de nuevo en el parlamento italiano una ley sobre los testamentos vitales, que permitiría que la gente pueda expresar cómo quiere que se le trate y atienda en ciertas situaciones, en caso de que pierda la capacidad de realizar o comunicar sus decisiones. Este es un paso fundamental para garantizar el derecho de las personas a la libre determinación, como señala la Associazione Luca Coscioni, que lleva mucho tiempo defendiendo esta ley (aquí su vídeo). ¡Esperemos que Italia finalmente logre una regulación más humana de las decisiones sobre el final de la vida!