La líder del partido de extrema derecha de Francia, Marine Le Pen, ha propuesto que los niños inmigrantes que se encuentran ilegalmente en Francia deben ser rechazados en las escuelas. Le Pen trata de justificar su propuesta declarando: "No tengo nada en contra de los extranjeros, pero les digo: si venís a nuestro país, no esperéis ser acogidos, atendidos en el sistema de salud o que vuestros hijos se eduquen de forma gratuita".